La revancha de Mejías, quien recordó que antes de volver lo llamó Peñarol

Luego de aquella partida dolorosa y que dejó el arco tricolor a Sergio “Chino” Rochet, Luis Mejía retornó y se volvió a ganar el afecto y el reconocimiento de la hinchada tricolor.
Cabe recordar que fue en diciembre de 2020 que Luis Mejía, quien defendió los colores de Nacional durante cinco años, se despidió del club y de sus seguidores al confirmarse que no seguirá siendo jugador tricolor.
En una carta publicada en su cuenta de Twitter, el arquero lamenta la manera en la que se va, después de un año que lo vio envuelto en polémicas por no aceptar la suplencia cuando se le dio la titularidad a Rochet, quien, a la postre, se quedaría con el 1 tricolor de manera permanente.

El retorno

Luis Mejía retornó a Nacional en este año 2024 y fue el héroe de Nacional en la victoria clásica por penales este miércoles, dijo estar “muy emocionado por pegar la vuelta” al equipo tricolor. “Me voy a encontrar con muchos amigos y gente que quiero mucho. Se dio todo redondo. Ganar este partido, con todo lo que viví en dos días, fue muy emocionante”, comentó.

Quien tapó los penales de Byron Castillo y Maximiliano Silvera reconoció que recibió el interés de Peñarol antes de firmar con el Bolso. “Estuvo la posibilidad pero todo el mundo sabe que Nacional es mi casa. Cuando llegó el llamado de la gente del club, no lo dudé. Estoy muy agradecido y por suerte se dio la vuelta”, indicó.
El arquero panameño dijo haber vivido “dos días de locos” antes de su arribo a la institución. “No fue fácil la salida de Unión Española, me la complicaron un poco, pero Nacional hizo todo para que estuviera y le agradezco a la gente que hizo todo esto posible y a mi representante, que jugó un papel muy importante”, destacó.
“Desde que tuve la posibilidad de venir a Nacional, tenía las ganas de estar”, sostuvo Manotas, quien llegó al país el martes de tarde, concentró de noche y jugó el miércoles. “Desde el 4 de enero venía haciendo la pretemporada y el Chino [Recoba] me mostró sus ganas de que estuviera presente. Se pudo dar y por suerte pudimos ganar un clásico”, explicó.
“Llegué el martes, fui a conocer a los compañeros al entrenamiento y no me dio para entrenar de tarde. Nos movimos un poco de mañana e hicimos un poco de pelota quieta y de salida. Eso fue lo que hice con el grupo nomás”, contó Mejía, quien ponderó “el cariño de la gente” que recibió “estando en Chile y al volver a Racing”. “Es un cariño muy especial. Quiero mucho al club y estoy feliz de estar acá. Reencontrarme con gente que quiero hace todo más fácil”, dijo.
A la hora de elegir una de sus intervenciones en el tiempo regular, eligió la que salvó a Nacional del 1-2. “El último mano a mano con [Maximiliano] Silvera porque era una jugada casi a lo último. Por suerte lo pude ahogar y no pudo definir cómodo”, dijo, y reconoció que el penal que le cometió a Nahuel Acosta, luego invalidado por offside, “fue una jugada con muchos nervios” por ser “un mano a mano para jugarse al todo o nada”.
Respecto a los penales contenidos en la definición, dijo que hay “de todo un poco; intuición y el cuerpo técnico, que también estudia a los rivales”. “Me dieron las armas para llegar a los penales y por suerte tapé dos. Me dieron la tranquilidad para lograr el triunfo”, comentó, y agregó que “siempre ganar te da tranquilidad, y más por todo lo vivido en dos días”.