El candiato colorado Perna está en contra de la mayoría de los políticos y propone “mano dura y plomo” a los delincuentes

Llegó   a EL ECO una foto de un comité colorado que tenía como candidato a diputado a un joven hombre llamado “Pablo Perna”, pensamos que se trataba de una imagen trucada. Nos pusimos en contacto con el propio Perna y no. Definió que es su “eslogan”, y nos dio sus datos: “soy abogado, candidato a diputado por la lista 13 del Partido Colorado, en Salto”, y como tal “acompaño a la presidencia al candidato José Amorín Batlle”.
El verborrágico Perna  se mostró convencido que hay que endurecer la penas y matar en “legítima defensa”. Repitió una y otra vez que los uruguayos “tenemos que cambiar la legítima defensa y establecer que podés matar a cualquier persona que entra a robar a tu casa o a tu comercio. Los delincuentes tienen que saber, les tiene que quedar bien claro que si van a robar pueden terminar en el cementerio”, manifestó, y continuó, “cuando hablamos de mano dura hacemos referencia a que tenemos que aumentar las penas”.
Dijo que está en “desacuerdo con el 60% de los políticos” porque son “tibios”. Está en desacuerdo “con el nuevo Código de Proceso Penal”, más allá que haya sido votado por todos los partidos políticos. “Si llego a diputado voy a tratar de cambiar las leyes. Mano dura y plomo en la legítima defensa”, reiteró.
Sostuvo que los delincuentes que cometen delitos “graves no se recuperan” Y agregó: la mayoría de los delincuentes vuelven a reincidir”, por eso le interesa más que nada el plomo. EL ECO le hizo mención que las cárceles están llenas en primer término de personas pobres, y que entonces lo que se hará será matar a pobres. “A los lumpen hay que limpiarlos, antes que te maten”, afirmó.
Repitió que no le mueve un pelo que lo comparen con el presidente de Brasil. “No me molesta que me comparen con (Jair) Bolsonaro, lo que sí me molestaría es si me compararan con el débil mental de Maduro”.
EL ECO intentó comunicarse con José Amorín Batlle para conocer su postura frente a un hombre que está en sus filas y que opta por  aplicar violencia a la violencia, pero el senador colorado, por primera vez, no atendió las llamadas del semanario.