Fernández Galeano: “Tenemos que cuidar a los niños que nacen como joyas de la corona”

Fernández Galeano fue subsecretario de María Julia Muñoz cuando ella se desempeñó como Ministra de Salud Pública (primera gestión del doctor Tabaré Vázquez). Juntos, impulsaron la reforma del Sistema Nacional Integrado de Salud.
Es asesor y consultor de la Organización Panamericana de la Salud y conoce de gestión en el área de la salud. En diálogo con EL ECO, afirmó: “yo creo que estamos frente a un incremento de la mortalidad infantil que no es esperable, no es un tema para hacer un escándalo, pero sí para ver cuáles son las causas de ese aumento que subió de 6,22 a 7,30. Y si uno toma la serie histórica es uno de los crecimientos más significativos de la mortalidad infantil”.

La búsqueda de los motivos

Si bien desde el punto de vista técnico hay que ver qué pasa en períodos más largos de tiempo, llama la atención esta subida y hay que preguntarse por las causas. “Sin duda la baja de natalidad es un factor que incide sobre la tasa de mortalidad infantil porque la tasa se construye calculando sobre los niños fallecidos menores de un año por mil nacidos vivos. Si el número de nacidos vivos baja de 50 mil a 30 mil en los últimos ocho años, es razonable que esto tenga un impacto sobre la tasa de mortalidad infantil”.
Pero también es cierto que desde el año 2022 al 2023, la post pandemia no incidió en la mortalidad infantil. Las organizaciones de la salud afirman que no influyó en el mundo. Sí hay que comparar lo que pasó en los últimos años. Uruguay venía bajando sostenidamente la mortalidad infantil, pero ahora nos encontramos con que ha subido. “Realmente vemos que en un país con baja natalidad tenemos que cuidar mucho los niños que nacen. Pero si no se controla el embarazo, si se abandona el primer nivel de atención como ha pasado en los últimos años, es muy probable que crezca la prematurez y prevenirla es, sin dudas, una forma de prevenir la mortalidad infantil y la mortalidad infantil neonatal hasta los 27 días de vida”.
“Si no controlo el embarazo, si no trabajo sobre los factores que inciden, voy a tener nacimientos prematuros y eso va a aumentar la mortalidad infantil”, evidencia Galeano.
Por eso el control del embarazo es un factor muy importante, “pero han disminuido los recursos tecnológicos y los recursos humanos en las maternidades de los hospitales públicos. En el Hospital Pereyra Rosell, disminuyó la atención en neonatología y va a tener un impacto sobre la mortalidad infantil. Si uno va a las causas de la mortalidad infantil en el año 2023, ve que las afecciones originadas en el periodo perinatal son las que predominan”.

Políticas públicas

Las políticas públicas tienen que ver con lo que pasa con la mortalidad infantil, porque la tercer causa que aparece de mortalidad infantil son síntomas, signos y hallazgos no clasificados, causantes de 26 fallecimientos. En los últimos cuatro años, se dejaron de hacer auditorías de historias clínicas, expresó el experto.
“Si no hago auditorías voy a terminar no sabiendo por qué pasan algunas cosas. Lo que hemos hecho es poner arriba de la mesa un tema”.

-¿Entonces los dos factores fundamentales que llevan a un aumento en la mortalidad infantil son la reducción o falta de políticas sociales y de políticas de salud?
-Los indicadores de mortalidad infantil de nuestro país son mejores que los de muchos países de Latinoamérica, pero no podemos dejarnos estar y debemos tener la capacidad de cuidar los 30 mil niños que nacen al año como si fueran las joyas de la corona. Debemos mirar la infancia no como el país que le vamos a dejar a los niños, sino como los niños que le dejamos al país. Si dejamos niños pobres en áreas vulnerables y si la pobreza tiene cara de niño y adolescente estamos, haciendo una reproducción generacional de la pobreza y de la exclusión social.

No son slogan

Las infancias no pueden ser un slogan de campaña electoral, no pueden ser una prioridad retórica, sino una prioridad presupuestal. “Creo que el objetivo de una pobreza infantil cero no es una quimera sino que es un objetivo realizable”, razonó.
“Además de incrementar las transferencias de dinero para reducir la pobreza, hay que fortalecer las asignaciones familiares del plan de equidad, fortalecer el sistema de salud en las policlínicas y en la cercanías y reducir las consecuencias de la pobreza y los debilitamientos de los sistema de salud”.
“A nivel personal cree que al igual que el Fondo Covid, se puede crear un Fondo Primera Infancia que permita contar con los recursos presupuestales en cada uno de los organismos orientados a atenderlos”. Esto ayudará a “abatir la pobreza infantil y la pobreza infantil extrema”.

Fernández Galeano

El salario también es causa

La reducción del salario durante cuatro años tiene un impacto inexorable sobre la pobreza, no hay dos cuentas para hacer, remarcó Fernández Galeano.
“No alcanza con que haya un aumento salarial en el último año. La acumulación de cuatro años con reducción salarial se va a constatar en mayor pobreza y vulnerabilidad de la pobreza. No solo en lo que está abajo del nivel de pobreza, sino también en los grises cercanos”.
“Hay una cronificación de la pobreza. También se consolida en los territorios. La caída a la pobreza es muy rápida pero la vuelta de la exclusión a la integración social es muy trabajosa, requiere de políticas públicas y recursos públicos. Creo que es antiético que salgamos a un próximo gobierno sin dar prioridad a este tema”.
“Si hay algo que debo auto criticar a las políticas progresistas, es que no terminaron con la pobreza y es algo que un país como Uruguay no se puede permitir”, dijo Galeano en referencia a las administraciones frenteamplistas.
“Tenemos crecimiento de la pobreza porque hubo mayor desigualdad, eso genera también mortalidad infantil. La teoría del derrame es la mentira mayor del liberalismo, el derrame no existe”.