Cereoil y Cosechas del Uruguay: Dos menos y cientos de afectados

Las dos eran del mismo rubro: acopio y exportación de granos; los dos empresarios con escaso tiempo de diferencia se fueron sin dar explicaciones a los trabajadores; las dos empresas pasaron a concurso de acreedores y dejaron un tendal de cuentas impagas, nos referimos a Cereoil y a Cosechas del Uruguay, ambas afincadas en Nueva Palmira.

William Johnson, principal de Cereoil en Palmira y Dolores, además de pasar al seguro de paro a decenas de trabajadores de oficinas y a más de 100 operarios de empresas tercerizadas que le prestaban servicios (secado, balanza, depósitos, etc), dejó un tendal de deudas en empresas, por alquiler de depósitos, transportistas, estaciones de servicio.

Este señor también era socio mayoritario del Molino Dolores de donde huyó al mismo tiempo dejando a cien operarios de brazos cruzados, e innumerables deudas bancarias. Los trabajadores se pusieron la empresa al hombre, con la participación de un síndico, y siguen fabricando harina.

El argentino Tomás Leguizamón fundó Cosechas del Uruguay en el 2006 y hace unos tres meses abandonó su planta de acopio de 32 mil toneladas de granos. A su vez, le puso candado a sus 4 mil hectáreas de campo tras cosechar rindes récord de soja. Se fue y dejó sin trabajo a unos 25 operarios directos (planta y campos), e innumerables deudas: prestadores de servicio (transporte y maquinaria de campo), fertilizantes, bancos. La lista sigue, es larga como la de Johnson, su colega y vecino empresario en Nueva Palmira.

Tanto Leguizamón como Johnson se fueron sin previo aviso a sus trabajadores y acreedores y nunca más se los vio. En tanto otros, a consecuencia de Leguizamón y Johnson debieron cerrar sus empresas, y la lista de trabajadores desocupados será larga (a partir de noviembre y diciembre), cuando se les termine el seguro de paro.