Clínica Kenny, al cierre definitivo o ¿tiene una tabla de salvación?

La Clínica Kenny es de esas organizaciones o propuestas que no se las valora cuando están presentes, pero se sentirá si desaparece. Quizás forma parte de una forma de ver el mundo de aquellos que la impulsaron y que luego la sostuvieron.
En busca de las explicaciones de por qué cierra sus puertas la histórica Clínica Kenny, EL ECO dialogó con Valdo Thove, quien con palabras envueltas en tristeza nos fue detallando el por qué del cierre, pero también recordó sus inicios, los socios que tiene, los servicios que brinda y cuáles fueron sus mayores satisfacciones en este lugar dedicado a la recuperación de las personas.
“No es el coronavirus, esta situación lo que hizo fue trancar recursos que íbamos a conseguir, pero el motivo de cierre es de tiempo atrás”, señaló.
Thove recordó que los ingresos fueron “siempre pequeños, como la mayoría de las Ong. que son sin fines de lucro y pelean para servir a la comunidad, y en este caso desde hace tiempo atrás que veníamos mal, endeudándonos incluso y hace un año que teníamos eventos en busca de finanzas, teníamos algunos más para este año para ir tironeando… Pero ahora se nos trancó todo, y además ahora la Clínica permanece cerrada por el coronavirus y se nos hace imposible mantenernos”. Sin duda cuando el país retome su actividad una posibilidad para la Clínica Kenny es que instituciones deportivas o sociales puedan realizar convenios con la Clínica.

Los inicios de Clínica Kenny contra la poliomielitis

“Parece una ironía del destino, porque se funda a fines de la década del 50, cuando se vivía la epidemia de la poliomielitis y ahora tiende a desaparecer con otra pandemia”, indicó.
Pues esta clínica nace para atender a todos los niños atacados de poliomielitis, “como se la conocía la enfermedad: parálisis infantil que dejaba muchas secuelas en su momento”. Después continuó con la atención y tratamientos de recuperación a personas de escasos recursos, “es tan así que desde hace tiempo atrás a los pacientes del hospital se les cobra 50 pesos la sesión”.
Thove aclaró que tenía ingresos por socios, por colaboradores, incluso –como otras Ongs.- recibían un porcentaje de las multas de tránsito, “pero para ver cómo está la cosa, aún no hemos cobrado el segundo semestre del año pasado, pero los otros que si cobrábamos, no alcanzaron ni a tres mil pesos mensuales”.

Los socios

Unos 170 socios suman la masa social de la Clínica Kenny, cuando en realidad necesitaría unos 500 socios para mantenerse “y realmente de quien se recibía o se recibe más ayuda pero de una manera distinta es del Banco de Previsión Social (BPS) para la compra de equipamientos”.
Aumentar la masa social sería la solución para que no cerrara, “pero con la pandemia y que aparentemente no vamos a salir muy bien parados en la parte económica, no nos hacemos muchas ilusiones. Entonces sabiendo eso y endeudándonos, no podemos continuar”.

Los pacientes

“Hoy más que nada se trabaja con personas de mayor edad, la que empieza a sufrir los achaques, aunque la Clínica está capacitada para hacer rehabilitaciones de todo tipo, y ya le digo, lo hacíamos prácticamente gratis a los pacientes que venían de Salud Pública”, recordó Thove.
Porque es una realidad, que salvo alguna clínica privada, Clínica Kenny es la única que tiene determinado equipamiento, como la camilla de tracción que no existen muchas en el departamento de Colonia y que tiene un costo muy alto.

El cierre: “la verdad que una gran tristeza”

Preguntado por EL ECO sobre qué le genera que Clínica Kenny cierre sus puertas, Valdo Thove hizo una pausa y respondió: “la verdad una gran tristeza y una decepción, quizás conmigo mismo, que después de haber trabajado duramente tantos años y a lo que se le dedicó mucho tiempo, quizás no nos supimos adecuar a los tiempos que correen no sé…”
“Pero lo que sí quisimos llevarle a la gente más humilde, más necesitada, es que tuviera el tratamiento indicado para seguir con su vida. Además con dos técnicos especiales; por su profesionalidad, por su simpatía, por su calidez, nuestros fisioterapeutas Helena Moreira y José Rocca”.

Grandes satisfacciones

“Hay muchas satisfacciones, pero si tuviera que elegir una, es cuando una persona agradece, no porque vayamos a buscar el agradecimiento sino que uno siente que la persona que está agradeciendo se siente mejor, se siente bien, y más cuando es un chico y el padre o la madre lo trasmite. Son situaciones que no se pueden valorar de ninguna manera, salvo lo que viene del propio efecto, nada más”, señaló.

El equipamiento de Kenny

De acuerdo al detalle enviado a EL ECO, la Clínica Kenny cuenta con este equipamiento:
– Bicicletas fijas.
– Caminador.
– Paralelas.
– Colchonetas.
– Ultrasonido.
– Láser.
– Tens
– Corriente galvánica.
– Interferencial.
– Ondas rusas,.
– Electroestimulador muscular,
– Magnetoterapia.
Camilla de tracción cervical y lumbar.

Clínica Kenny: “damos un paso al costado”

A continuación transcribimos la carta que emitió la comisión directiva de la Clínica Kenny donde informa que luego que pase “el drama del coronavirus” llamará a Asamblea de Socios para tratar como único punto del día el cierre definitivo de la Clínica.

“Colonia, 25 de abril de 2020
Ante la situación económica que estamos padeciendo comunicamos a la población en general que, una vez que podamos efectuar reuniones, llamaremos a la Asamblea de Socios para tratar un único punto. El cierre definitivo de nuestra Clínica Kenny, liquidar el activo y pagar las deudas que se mantienen así como los despidos y compensaciones.
Agradecemos a todos aquellos que nos han ayudado en estos difíciles momentos, a las empresas que colaboraron con nosotros y, en especial, al personal profesional que siempre estuvo a nuestro lado, pero debemos rendirnos ante la evidencia.
Si algo faltaba la llegada del Coronavirus aceleró nuestro proceso, no es una excusa, nuestro mal tiene más antigüedad, pero el día que se anunció la aparición del virus poníamos a la venta entradas en el Teatro Bastión del Carmen para el día 3 de abril, donde se iba a realizar una función a nuestro beneficio con actores de nuestra ciudad que, como muchas otras personas e instituciones, fueron sensibles a nuestras necesidades, por lo que aprovechamos para agradecer a todos y a cada uno.
Por otra parte y desde un primer momento expresábamos que se necesitaban quinientos (500) sólo para hacer frente al presupuesto mensual, sin gastos extras. Iniciamos campaña, pero al día de hoy no llegamos a doscientos. Teníamos otras posibilidades a corto plazo que tal vez nos permitirían continuar, a los tumbos, pero continuar: una rifa, teniendo ya en nuestro poder algunos de los premios, otra función de teatro con actores en conversación, etcétera.
Conscientes de que para mantener una obra benéfica como es la Clínica Kenny hace falta el apoyo popular, en un recíproco juego de ayuda, y teniendo en cuenta que, una vez terminado este drama que estamos viviendo la salida no será fácil y costará mucho normalizar la vida de todos nosotros, damos un paso al costado. Lo nuestro es muy pequeño para continuar solicitando esfuerzos económicos a la población de Colonia.

A todos muchas gracias.

Comisión directiva”