Gran fiesta umbandista: Curaciones y pedidos a Iemanyá en la Playa de Brisas

A ruido del tamboril y maraca,  umbandistas vestidos de blanco, y en estado de trance, hablando en portugués,  bailaron en la playa, encendieron velas, hicieron dibujos en la arena,y pasaron sus manos cerca del cuerpo de las personas que deseaban curaciones. Ya sobre el final cargaron una barca de unos dos metros de largo, que llevaba en su interior ofrendas para Iemanyá.

La barca con velas encendidas en sus bordes, y ofrendas en su interior (papelitos con pedidos), frutas y pororó, fue cargada por los umbandistas y cuando el agua les dio sobre la cintura la largaron para que se fuera “donde la Mae Iemanyá quisiera”, dijo Anamá.

Este domingo 2 de intenso calor, la barca perdiéndose en el calmo río alumbrada por la corona de velas, ante un cielo rojizo por el sol que minutos antes se había ocultado, invitó a observar la escena hasta que ganó la oscuridad de la noche y se apagaron las velas lejos de la costa, en el ancho río Uruguay.

Finalizada la sesión, los umbandas retornaron al Ile (templo) ubicado en Pavón y San Martín.

En la zona de la playa  Higueritas otro grupo umbandista también realizó su sesión.

Así pasó en Nueva Palmira y en muchos puntos del país, en Brasil y África, principalmente, la fiesta de Iemanyá.
Asistió más públicos que en otras ocasiones, en este caso formaron una corona en la Playa Brisas y en Higueritdas sentados en sillas playeras, observando respetuosamente la sesión umbandista.

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