🔑 Efectos de la crisis: La Chacra cerrada hasta que vuelva a la normalidad

Dejó su trabajo de fotógrafo para dedicarse exclusivamente a los eventos y la pandemia lo mató comercialmente.
Actualmente está en proceso de reinvención y la próxima semana abrirá la bizcochería “La Chacra”, utilizando las cocinas que tenía en el predio del salón de eventos.
“El negocio está paralizado totalmente, desde marzo cero, pero estoy en regla”, señaló a EL ECO. “La ley me permite sesenta personas adentro y cien afuera sin baile, por el espacio no tengo problemas, son como trescientos metros cuadrados cubiertos. Cuatro horas y hasta las 12 de la noche”, indicó.
Pero actualmente “nadie quiere hacer nada, los clientes están reprogramando las fiestas”.

La decisión

“Nosotros decidimos no abrir hasta que el gobierno nos deje realizar las fiestas como se acostumbraban”, explicó. Y es que “si no podés bailar mejor lo hacen en su casa”.

Aquel mes de marzo

El 14 de marzo tenía un cumpleaños de 15 y un cumpleaños infantil que comenzaba a las cinco de la tarde. “Me llamaron de Jefatura y de la comisaría de Carmelo y me lo cortaron. Fue cuando prohibieron los eventos públicos y desde entonces estoy paralizado y sin ayuda ninguna”.
Manzino dijo que “estoy usando los ahorros y comenzando un nuevo emprendimiento”, es decir buscando salidas a la situación económica.

Reinventarse

“Voy a hacer una bizcochería en donde tenía el salón de fotos”, le contó a EL ECO, “porque como tengo las cocinas habilitadas acá, me permitieron en la intendencia trasladarlas para el local, que lo estoy habilitando para ventas.  Voy a hacer bizcochos, pan y todo lo que hacíamos acá para las fiestas. El emprendimiento se va a llamar La Chacra y abrimos la semana que viene”.
Estará ubicado en 25 de Mayo casi 19 de Abril.

“No existimos para el gobierno”

Un grupo de fotógrafos que también tienen salones de fiestas se comenzó a reunir a partir de la pandemia, “como estuve muchos años en Montevideo tengo muchos amigos y muchos tienen salón de eventos. Nos juntamos como cuatrocientos en un grupo y armamos una asociación y estamos comunicados con el gobierno permanentemente. Pero nunca nos solucionaron nada”.
La semana pasada o la otra estuvieron con el ministro Daniel Salinas quien nos dijo que su hijo postergó el casamiento de marzo para octubre, porque parece que en octubre podría mejorar la cosa, “pero mientras tanto todos seguimos pagando BPS, y DGI y las habilitaciones municipales. Tuve un año casi sin trabajar y casi seguro otro año más”.
Reflexionó sobre su emprendimiento “esto es un muerto que tengo que cortarle el pasto y mantenerlo, se deteriora más estando cerrado que abierto. Los trabajadores que tenía eran jornaleros del día, nosotros estuvimos luchando para que esos jornaleros tuvieran un seguro o algo y no nos dieron bola. Es como que no existimos para el gobierno”.
Nos echan la culpa que la pandemia entró a Uruguay por un evento, el de la famosa Carmela, pero “menos mal que fue en un evento y se pudo saber quién era. Imaginate si hubiera sido en una cancha de fútbol”, reflexiona.