En almacén y supermercados “comprar productos B” que son más baratos y “de calidad” como los “A”

La suba del dólar, de tarifas públicas, el aumento de la compra de alimentos con fines de tener stock en el hogar por el Covid 19, el cocinar más en casa al no poder concurrir a restaurantes, provocó la suba de todo lo que son alimentos, desde marzo 2020. Nadie quedó ajeno.
En algunos casos se han registrado entre tres y cuatro subas de precios de marzo a la fecha. Quien gana 12.000 pesos de pronto tiene que destinar prácticamente todo ese dinero a alimentos, y el que gana 100.000 tiene un importante margen para dedicar parte de sus ingresos a otras compras.

La fijación de precios

Ameijenda, presidente del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu), sostuvo en diálogo con EL ECO que “ahora se ven muchas ofertas, han aparecido listas de precios. Como todo está dolarizado y el dólar bajó, tranquilizó a los mercados”.
Opinó el presidente de Cambadu que si bien se está deseando que se abran las fronteras para que venga el turismo “se va a ir medio país a comprar a la frontera, porque tanto Argentina como Brasil tienen precios más bajos. Ellos tienen una industria muy poderosa, bajaron las ventas por la pandemia y tienen mucha mercadería”.

El plan B para el consumidor

Como forma de contribuir a que el cliente compre más con menos dinero se “lo está alentando a que consuma productos que son buenos aunque no sean de marcas reconocidas”. Como ejemplo puso que “hay arvejas de diversas marcas y casi todas son buenas, varían sus precios no la calidad en términos generales, y así pasa con muchos productos”. La gente también está comprando lo que rinde.
Los supermercados también están “poniendo marcas propias, se mandan a hacer, por ejemplo salsas, fideos, llevan el nombre del supermercado, son de calidad y cuestan menos. Todas las líneas tienen productos A y B, y de pronto el B es de igual calidad que el A. Yo a mis clientes les hablo de eso siempre. En definitiva gana el cliente y el comerciante”.

Cambios en servicios

‘El quedate en casa’ también provocó cambios en los negocios. “Está viniendo mucha competencia, las ventas online. Se instala ‘pedidos ya’, un supermercado virtual, cerrado, sin atención al público y con una aplicación la gente recibe todo en su casa. Eso pasa por arriba a cualquier negocio, no importa la distancia, en una moto le llega enseguida el pedido”.
“Hay que buscarle la vuelta a todos los temas, escuchar al cliente, fijarse qué prefiere, ofrecerle productos frescos, de segunda línea que son tan buenos como los de primera”.