Hay 600 navegantes en un solo club de Argentina dispuestos a venir a Carmelo pero no vienen por falta de dragado. Vea el vídeo.

El sábado pasado, a media mañana, se vivía una actividad inusual en la zona del atracadero de Carmelo. Las cifras oficiales de la Subprefectura local señalaban que habían llegado unas sesenta embarcaciones. Que había pasado, pues había anuncio de buena agua en el Río de la Plata y por eso muchos nautas decidieron cruzar. Y fue como si el atracadero volviera a vivir.

Allí y gracias a la gestión del amigo Francisco Suárez, fuimos a conversar con el actual Presidente Del club San Fernando, Mario Bonini, quien en su club, uno de los tantos que hay en el delta, tiene seiscientos dueños de yates como socios.

Así que lo consultamos por las razones por las que cruza el río con su familia “somos fanáticos de cruzar el Río y venir a Carmelo, donde venía mi padre en los años cincuenta. Yo fui remero y vine a correr en los años 70. Con barco, hace treinta años que vengo” cuenta “es un paseo precioso, salvo cuando queremos entrar porque hace varios años que se nos dificulta por el dragado del canal que evidentemente está bajo y entonces arriesgar a romper una hélice como le ha pasado a mucha gente que este año no han podido venir y decidieron ir a la costa argentina siendo que son fanáticos de venir a Carmelo” dijo.

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