Por qué sigue clausurada la sede gremial de Maltería Uruguay

Enzo Guerra, vicepresidente del sindicato, dijo este jueves 25 a EL ECO que aparentemente “el expediente está en la Secretaría de Planeamiento y Ordenamiento Territorial” (Spot), a cargo del arquitecto Walter Debenedetti. “No avanza el trámite, estamos desde diciembre esperando respuesta”, para después “presentar los planos y solicitar la habilitación de bomberos”.
La clausura del local por parte de la Intendencia ocurrió el 22 de diciembre. Todo comenzó con la denuncia de una nueva vecina, que hizo su casa prefabricada justo frente a la sede sobre la calle Rondeau. La mujer denunció primero que en el local se producían“ruidos molestos”. Vino personal de la Intendencia y constató que los decibeles de la música estaban dentro de lo permitido. Entonces, la mujer presentó otra denuncia: “falta de habilitación de la sede y salón de eventos, por parte de bomberos”. Y ahí sí logró que el gremio y la población quedaran sin sede, tanto para reuniones del gremio como para actividades sociales de la comunidad.
La sede gremial tiene dos fajas que indican la clausura. Es incomprensible que se perjudique de esta forma a un grupo de trabajadores agremiados, dejándolos sin su lugar de reuniones y perjudicando, al mismo tiempo, a toda una comunidad. Porque ¿quién en Nueva Palmira no ha asistido a una reunión o a una fiesta en ese lugar?
La sede se inauguró en el 2006. ¿Recién en el 2017 se piden las habilitaciones? Una acción que deja mal parada a la Intendencia de Colonia, y a la vecina en cuestión.
EL ECO se solidariza con la gremial de Maltería y se suma al reclamo de una pronta rehabilitación de su sede.
Nancy Banchero