Transportistas con esperas hasta más de 24 horas para descargar y cuidando que no le roben soja

“Miren tenemos que dormir con un ojo abierto, porque si nos descuidamos vienen los ‘pichis’ y con bolsas de plastillera nos roban carga”, dijo un transportista palmirense que hacía 25 horas que estaba en la cola sin saber cuándo iba a ingresar a la planta de acopio a descargar.

“Si voy a una chacra que me queda a 30 kilómetros gano 2000 pesos y a una que está a 100 kilómetros 5.000 pesos, pero contando las demoras no gano nada”, señaló a EL ECO pintando la realidad que padecen los choferes.

Al preguntarle si podía ir a dormir unas horas a su casa, al vivir en Nueva Palmira, respondió: “no puedo, tengo que cuidar la carga” y en esa postura estaban todos los camioneros con los que conversó el semanario, al salir de Cargill.

Otro chofer, él oriundo de “Manantiales (Maldonado), pero trabajador en el litora señaló: “llegué anoche a las 12, es la 1 de la tarde y sigo esperando, no sé cuándo me toca porque aparte de esta cola está la que hay adentro de la planta. Cuando llegué habían cerrado la empresa y la abrieron a las 5 de la mañana, imagínense lo que es estar aquí…”

Más sobre el final de la cola había dos jóvenes choferes que también habían pasado la noche, uno contó: “anoche la policía agarró a uno en la ruta con soja, no sé bien qué pasó”. Y el otro agregó: “aquí no se ve nada (calle de balasto paralela a la ruta 12), no tenemos focos de luz, están los que alumbran la ruta que es por donde pasa la policía”