Ute pone a los usuarios bajo la lupa

Comenzó el “despliegue masivo de los nuevos medidores inteligentes de consumo eléctrico”. La iniciativa está dentro del ‘Proyecto Redes Inteligentes’ que está llevando adelante UTE y forma parte del sistema AMI (Infraestructura de Medición Avanzada) que la empresa eléctrica está implantando”, indica el comunicado emitido por UTE.
“Estos nuevos medidores inteligentes representan un salto cualitativo significativo respecto a los medidores tradicionales, ya sean electromecánicos o electrónicos, y presentan grandes beneficios”, según UTE.
Una de las funciones “es la posibilidad que la lectura del consumo eléctrico sea realizada a distancia (“telemedición”) a través de un sistema de comunicaciones, que en el caso de UTE se basa en la combinación de la red de fibra óptica al hogar (FTTH) y la red celular 3G.
El medidor inteligente “registra un histórico del consumo de energía y de los parámetros del servicio eléctrico entregado al cliente (voltaje, corriente, factor de potencia) en intervalos de 15 minutos. Esto permite conocer con gran detalle el “perfil” de consumo de un servicio (la denominada “curva de carga”), así como la calidad del suministro entregado. Contar con esta información le posibilita a la empresa eléctrica conocer mucho mejor a sus clientes, pudiendo realizar una mejor planificación de la oferta de energía y generar planes mucho más personalizados a la demanda real de los clientes. Por otro lado también le permite un control de la calidad del servicio entregado prácticamente en línea, optimizando el trabajo de campo requerido para el mantenimiento de la red”.
También, los medidores inteligentes poseen una llave de corte incorporada, lo que “permite simplificar toda la gestión de cambios de contratos (aumento de potencia) ya que la limitación de corriente se configura en el medidor y ya no es necesario cambiar físicamente la llave. Asímismo, los cortes por falta de pago u otras situaciones contractuales, así como las correspondientes re-conexiones se pueden realizar en forma remota, sin pérdida de tiempo y minimizando los recursos requeridos para llevarlos a cabo”.
“Otra funcionalidad novedosa de estos dispositivos es la denominada “last gasp” (último suspiro), que consiste en la capacidad de avisar a los sistemas centrales de UTE que se ha producido un corte en el suministro eléctrico. Esto permite conocer la situación anómala del servicio sin siquiera necesitar que el cliente llame para reclamar. Además, procesando la información de los distintos eventos de este tipo es posible determinar con mayor precisión la falta que ha ocurrido, optimizando el proceso de recuperación del servicio”.
“Los nuevos medidores también permiten enfrentar en forma efectiva el problema de los robos de energía. Su diseño anti-fraude es capaz de detectar y reportar inmediatamente si ocurrió una apertura del cubre-bornes o de la carcasa principal, así como otra serie de situaciones que representen posibles intentos de fraude”, según indica UTE.